He vagado por pieles
lluvias y cenizas
buscando llenar mis sienes de pensamientos diferentes
El amor
como argumento único de mis textos
ha prescrito a la sequía de mis versos
Me quedo con el sabor de la piel excitada
el brillo de los ojos deseosos
y el sabor de mis propios labios
Te devuelvo el amor
para que me concedas la libertad de crear,
sin que sea sobre el cementerio de los momentos vividos
adornados de la sangre de los labios rotos por besar
y el fétido olor a carne pudiéndose
de mengua por desamor.
Llévate todo eso, solo devuelveme las ganas de crear
sin que todo lleve nombre de amor por omisión.