Cosas y casos sin-enmiendas

13.2.11

Puerto la nada...


Quiero reposar en ese breve espacio entre tu piel y tu aroma. Ahí donde lo etéreo se convierte en el alimento de mis sentidos. Me permite dibujarte, encontrarme y cada milímetro que recorre mi mano, descubrir que el mundo es mundo desde que existes en el.
Estoy quizás es lo mas trillado que se ha escuchado sobre un amor o un amante, pero que pasa cuando aquello que se convirtió en mi alimento ya no está?. ¿Cómo reconocerme y sentir que existo si aun tu existencia no se ha cruzado con la mía?
Tan sencillo como nada, un espacio inerte, vació y olvidado que llena de aire el tiempo, que lo entretiene mientras muere con las ganas locas de amar a alguien. Así muchos caminan incansablemente por la vida esperando encontrar el amor en algún lugar. Yo intento desesperadamente descubrir el camino más acertado para acercarme a ti.
Pero qué difícil es, porque no sé cómo abordar el barco de la seducción, no sé como levar las velas, la ancha no esta echada en puerto alguno, porque te busco como puerto. Quiero inventar la máquina perfecta para desnudar tus sentimientos y conseguir habitar en ellos, ponerle dirección a mi correspondencia y llamar hogar a tu pecho, ese que maravillosamente me permita estar en ti y ponerle tus latidos a mi oído como la mejor banda sonora.