Cosas y casos sin-enmiendas

6.8.11

Juntos

Un breve espacio tu
Un breve espacio yo
Vacíos de humo y cenizas
De sol y viento
De ti y de mi
Llenos de todo lo que no tengo
Al no tenerte
Vacíos de tan poco tu
Cuando no estas.
Llenos de nosotros cuando estamos juntos.
Invitamos a tu estar a mi vacío?
Así mi vacío lleno de ti jamás volverá a estar solo

1.8.11

En el Archivo de un Quizás

Parece imposible arrancarte del recuerdo
Pueden ser miles las lunas donde no te veo
Y la misma cantidad de lunas las que te deseo

Dicen que los besos se evaporen en la piel
Digo que los tuyos se me tatuaron en los huesos
Digo que los míos lo clave a fuego lento

Siento que el tiempo pase tan lento
Siento que no estes aquí adentro
Siento que me deshielo cuando estas en mis recuerdos

Quiero comprar un hilo blanco para tejerte un pañuelo
Quiero que con el limpies tu sien
Quiero que con el recorras tu pecho
Quiero que con él me digas siempre adiós

Y al regresar…

Al archivo del quizás

Amarte locamente
Amarte sin medidas ni testigos
Amarte como antes, como ahora y ojalá como siempre.

En la ermita…

Giro en la calle a la derecha,

me pierdo entre la gente

vienen, van,

me detengo al borde de la acera

como quien se detiene frente a un gran precipicio,

quiero dar un paso al frente

pero es inútil,

ni un solo coches pasa que puedan ayudarme a concluir el encierro en mi.

Me giro,

sigo adelante,

la calle se hace estrecha y la pendiente mas empinada,

los transeúntes escasos.





A medida que se aleja el camino del pueblo

Vamos quedando solo mi cuerpo y mis pensamientos

Al final de la calle un perro,

tras el perro la puerta de la ermita.





Entro,

Por educación me persigno ante el altar, a modo de saludo

Está Jesús crucificado y María sufriendo su perdida

El Santísimo Sacramento del Altar expuesto,

solo frente a mi

Nadie más que yo



Mi miseria y yo nos sentamos en primera fila

Para que no se confunda de observador el Señor

Nos hincamos de rodillas

A mantener una conversación,

que más que una oración

es una súplica.





No sé como pedirle a Dios

Consuelo por no tenerte

O perdón por haberte tenido.


Así, mi miseria y yo seguimos de rodillas


Ante un lujoso altar de oro y piedra

Ante los ojos inertes de la Virgen desconsolada
Y Jesús inmóvil


Terminada la suplica,

creo que me ha concedido Dios el milagro


Casi no me siento

Escasamente escucho mi corazón latir

El silencio de la ermita es más que el mío

Mi soledad es más que su silencio

Mi deseo de ti es más grande que el oro de su altar

No puedo construirte un templo para adorarte

Humildemente te adoro en este corazón mío



Así me encuentro

Siento que Dios se apiada de mí

dejo de sufrir

Ya no tengo tanto dolor,

Ya no te siento,


Me levanto y camino hacia la escalera que da al campanario

Comienzo a subir

Mi corazón no hace ruido

Mi respiración es un susurro

Mis pies casi levitan sobre los escalones

Me asomo por la ventana que da al patio,

el perro ladra desesperado

Nadie viene en su ayuda

Entra y sale de la ermita como anunciando algo

Doce veces lo hace

Las mimas que dan cuenta las campanas de la ermita





Por eso ha de ser que nadie lo escucha

Porque su noticia no es más importante que el tiempo

Cuando me decido a mirar por la ventana interior de la torre,

aquella que da al altar, finalmente me encuentro

Entiendo la desesperación de aquel perro que ladra sin cesar

Esta anunciando el llanto de mi miseria

Que cual María llora su perdida

Sobre mi cuerpo interfecto que murió de amor por ti

Poco antes de que las campanas de la ermita

Anunciaran las 12 en punto del día de mi partida.

19.7.11

Esta noche.

Hoy el aire frio lleno la habitación, ni las respiraciones consiguieron calentarlo.
La luz no era más o menos, era la misma de ayer pero alumbraba menos.
Porque mis ojos se negaban a abrirse para no darle razón a mis oídos de las palabras que pronunciabas, tras cada una de ellas me sentí morir lentamente, poco a poco, como si de un veneno fino y rigurosamente letal habláramos.
Mis pies se sintieron fríos, la circulación de la sangre parecía haberse esfumado, luego las piernas se sintieron pesadas, el vientre dejó de agitarse, el pecho no conseguía expandirse para buscar aire, mis manos inertes no podían sostener la copa de vino y mis labios querían gritar pero no lo conseguían
Aquella sensación era como la de estar en medio de una pesadilla, de esos malos sueños que te poseen y no te dejan gritar. Entonces pronunciaste aquello, de no haber querido querer y fue cuando la orquesta se detuvo, mi corazón no latió más, mis labios exhalaron el último aliento y mis ojos se cerraron para no amarte más, pero tampoco amarte menos.
Desde entonces hace algunas horas deambulo por las calles de mi mente, esperando que tus manos vuelvan quizás a buscarme.

6.7.11

Hoy aprendí
lo largo que puede llegar a ser un día,
solo pensando en ti!
Luego coseché una sonrisa en mi recuerdo,
anidada en esta frase:
Una sonrisa significa mucho.
Enriquece a quien la recibe;
sin empobrecer a quien la ofrece.
Dura un segundo pero su recuerdo,
a veces, nunca se borra.
Ahora espero que el sol se ponga para dormir
y volver a soñar contigo!

25.6.11

Sin tiempo

El tiempo es corto cuando las esperanzas son muchas.



Pero cuanto no se tiene esperanza,


el tiempo no alcanza para inventar una estrategia válida para acceder a lo deseado.






Ahora no tengo tiempo, con lo cual, me declaro vulnerable a cometer errores que en lugar de acercarme me alejen mas de ti.







Apenas conozco de tus ojos un brillo imponente de categoría y de estampa. Un brillo que ampara una tristeza tardía y una belleza infinita. Pero como me invita a invertir tiempo en ellos para conocer más de ti.

8.6.11

¿Como no va a ser triste?

Ella me insistió en que el amor no es triste, cuando le conté todo lo que te quiero...


Pero como no va a ser triste despuntar el alba sin tus besos.
Huir del ocaso sin el toque de tus manos.
Saber que estas sin tenerte,
y saber que eres una creación perfecta sin poder decirlo?


Tengo ya tantas lunas deseando tenerte cerca,
mirarte dormir
y despertarte a besos,
que no cabe el dolor en las manos que se cierra por no poder tocarte.


Que no se descubre la duda,
ni muere la incertidumbre
Que mejor yace desnuda bajo el frio del invierno.
Este corazón errante,
En ese invierno eterno
Sin el calor de tus besos.


No quiero ver pasar el tiempo
y seguir sabores amargos,
no quiero mirarme en los días
donde la luz se torne opaca
por la apatía de saber si podrás quererme.


Hoy creo que lo justo empieza
¿Por donde?
por quererme más a mí y menos a ti.
Por olvidarte mas y recordarte menos,
por quererte nada y amarte muy poco.


Porque seguir así, no puede no ser triste.